Miro
para mis adentros y me digo que es mucho todavía lo que me queda por andar para
poder llegar a donde quiero; pero es tal la ilusión y el tesón que pongo, que
me desborda y me supera la alegría. Es el crecimiento del día a día cuando voy
puliendo, minuto a minuto, esas concesiones que, continuamente, me hago, por
simples que sean. Es
un precioso entretenimiento, es un deporte, es un juego que disfruto con
inmensa suerte, pues siempre lo juego con las mejores cartas; la gran Fortuna
hace que le gane todas las partidas a mi contrincante. Y veo el cielo abierto
cuando percibo ese crecer para dentro. Y aprendo, poco a poco, eso sí, lo mucho
que me queda por aprender. Y lo acojo con inmensa gratitud pues en todos los
momentos dificultosos siempre me llega el As que necesito para ganar la partida que estoy jugando. Y es que
ese tesón y esa ilusión van cargados de esperanza. También, porque cuando
recibí el precioso encargo me hallaba en el momento más oportuno y dulce.
¡Es
tan grato y amable ir ganando en pleno otoño! No hace ni calor.
+Capuchino de Silos
Crecer para dentro...¡qué hermoso, Capuchino! Escribí algo relacionado con lo que tú escribes.
ResponderEliminarEl Señor que fluye en nosotros con su amor eterno.
Un abrazo.
disfruto siempre que entro aqui.....cuantas cosas nos contariamos Capu...el interior es un mundo tan Misterioso, divertido y apasionante...verdad? uf como disfrutariamos.....
ResponderEliminarYo me he preguntado, ¿cómo me presentaré al Señor con las manos vacías? Pues parece que hago algo, y finalmente parece que nada he hecho.
ResponderEliminarYa estamos en otoño, un año más que está a punto de finalizar, luego vendrá el 2014. ¿Qué es lo que estoy haciendo por el Señor? Miserable de mí, un inútil me considero. Pero el Señor me ayudará, ¿cuándo comenzaré hacer algo útil para el Señor? Pues no sé si lo que voy haciendo, en realidad, no sé que intención hay, pues yo espero hacerlo para Gloria de Dios, caminar, y aunque he hablado tantas veces de oración, vuelvo a preguntarme, ¿de verdad que voy haciendo oración? Dios tiene todas las respuestas.
¿Es verdad que busco la Gloria de Dios o la mía? Pues yo quiero gloriarme en Cristo Jesús nuestro Señor, no buscarme a mí mismo. Temo aquel día que se acerca, José Luis, tu hipocresía y falsedad te ha dejado excluido del Reino de los cielos. ¿Puede ser acaso tentaciones?
Pues seguiré confiando en Jesús y no me apartaré jamás de Él, acudiré siempre a la Santísima Madre de Dios.
Feliz fin de semana Capuchino de Silos, con todas las bendiciones de la Santísima Trinidad y de María Santísima.
Capuchino, escribes magistralmente.
ResponderEliminarQué bonito, eso es superarse cada día, crecer como persona y por supuesto mirando hacia Dios. Me ha gustado muchísimo. Un fuerte abrazo y feliz fin de semana amiga.
ResponderEliminar