Me bastaba con eso, con cerrar los ojos y estar allí en ese instante tan especial que solo nos pertenece. Me bastaba ese momento que era vivido con alegrías o con penas, daba igual. Me bastaba con estar y sentir que cualquier cosa se convertiría en gozo avivando el fuego para que nunca se pudiese apagar.La rampa ascendente de la gracia es, en todas las situaciones, imparable y me cautiva, y me llena el tiempo meditándolo; y lo que medito armoniza y me arrebata exprimiendo mi alma al máximo. El universo entero se me parece como una gran montaña llena de misterio que subo radiante cuesta arriba, buscando la cima hasta tocar con los dedos el azul infinito.Y allí en lo más alto donde tanto brilla el sol, en ese ratito de intimidad, en esa hora, la más dulce del día, agradezco su generosidad porque está conmigo; me ve, me oye y me ama inmensamente y le digo que estoy con Él; que sé que me está viendo, que sé que me está escuchando y que mi cruz, en esa cuesta arriba, la está volviendo tan ligera que apenas la siento.+Capuchino de Silos'
lunes, 25 de junio de 2012
Es la llave.
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QUE BIEN SE ESTÁ EN ESE LUGAR DE INTIMIDAD CON EL SEÑOR,NO TIENE COMPARACIÓN CON NADA ...
ResponderEliminarHERMOSA REFLEXIÓN CAPUCHINO,DIOS TE BENDIGA.
Hola! Acabo de encontrar su blog, es muy lindo. Muy dulce lo que le ha dicho a Nuestro Senor aquí en este post y lo que su corazón le dice todos los días. Qué Dios lo siga bendiciendo!
ResponderEliminarAnte todo gracias, por su compartir, y gracias por su observación en mi blog pero no se de que comentario me habla ya que he revisado el blog y no encuentro en el ningun comentario que sea mal empliado, gracias por su delicadeza.
ResponderEliminarel Unico sitio que nos prepara para descansar de Verdad!!!!! un beso
ResponderEliminarHOLA QUERIDA AMIGA,TE VISITO PARA CONTARTE QUE HAY UN PREMIO EN MI BLOG PARA VOS,BENDICIONES.
ResponderEliminarEstimada hermana, sólo quien vive a Dios sabe descubrirle en todo, gracias por ser un alma de Dios, Dios sea con usted.
ResponderEliminarCómo se puede olvidar la carga tan solo con amarle intensamente.....cómo te envidio.
ResponderEliminarEsos ratos sostienen nuestra vida,
ResponderEliminarnada hay comparable a ellos...
Estar con El es la delicia de nuestras alma.¡Gracias Capuchino, como se nota que eres un alma de oración.
Un beso. Dios te bendiga.
Muchas gracias, y perdone mi torpeza, por no entender en el primer momento, gracias, sólo puedo decirle que está muy presente en mis oraciones, gracias por su sencillez y cercania, Dios la bendiga, un gran abrazo.
ResponderEliminarHay pequeños momentos que vales una vida.
ResponderEliminarRosa
Yo amo profundamente a Jesús, lo tengo presente en mi día a día pero no por eso olvido mi carga...mi cruz...y no se me alivia...a veces lo que siento es que cada vez pesa más.
ResponderEliminarLa mayoría de las veces que estoy en la intimidad con Él es para hacerle reproches....porque doy y doy y siento que Él me ignora, a pesar de mi profunda fe y mi profundo amor.